"La teología es juego, construcción, artesanía: cosa humana, por demás humana. (…).
Decir que los teólogos son personas que juegan al juego de las cuentas de vidrio es confesar que tienen sus pies en la tierra: porque un juego es algo que se construye de abajo hacia arriba, con astucia, ingeniosidad y sobre todo, amor.”
Rubém Alves, La teología como juego, Buenos Aires: La Aurora, 1982, pp. 20-21
No hay comentarios:
Publicar un comentario